In Memoriam
Rodolfo "Kacho" Cantú.
Lindo recibidor. Su mamá no escatimó en recursos al
buscar la capilla perfecta para el velorio. ¿Por qué un
velorio? Cada vez que veía a alguien relacionado con
su padre sentía que se iba a derretir en lágrimas. No lo
podía creer, pero estaba un estado (ya después del shock)
donde comenzaba a trivializar la gran cantidad de
materialismo que había en un velorio.
Esa gente que llega con su traje, bien presentado a la capilla,
ellos no vienen porque les agradaba papá. Esta es una mera
formalidad. Gente hipócrita que solo llega para saludar,
decir lo siento e irse.
Esto es una pérdida de tiempo y lágrimas.
Al fin vió a unos amigos pasar por la puerta y fue a recibirlos
como si se tratara de una fiesta y él fuera el anfitrión. Lo que se
podría considerar verdad.
-Hola. Siento mucho por tu pérdida.
-Gracias.
-¿Y cómo estás?
-Bien, ¿y tú?
¿Por qué dijo bien? No estaba bien, ni mucho menos.
Se sentía totalmente destrozado, indefenso, sin saber qué
pasará en un futuro.
Y se arrancó en lágrimas frente a sus amigos.
Kacho, fuiste y segirás siendo un chingón en toda la extensión
de la palabra.
Te vamos a extrañar cabron.
5, 3...