domingo, 19 de diciembre de 2010

Qué vacío.

Esa pintura en los ojos le daba una dimensión eterna que lo hacía caer y caer... nunca golpear el suelo hasta que sus pupilas le reflejaran el odio que únicamente ella le tenía. El suelo sonaba como un buen lugar en ese momento. Decir la verdad no le permitió unos minutos de quietud y pensamiento. La verdad es, al final de cuentas, inútil. Ésta no influye en las decisiones de nadie. Solamente es un dato que entorpece los actos de las personas.

Volteaba a ver las luces borrosas de los edificios que parecían engullirlo en penumbra. Lo único que evitaba era caer en esos ojos. No la veas, no la veas, se repetía a sí mismo. Recordaba que antes no podía esperar a verla. Agradecía su vista. La habilidad de contemplar... No: admirar. No tenía algo planeado. Soñaba con arreglarlo todo con un beso. Soñaba con un final feliz. Soñaba con volver, su torpe mano en contacto con la delicada y fina mano de ella. Todo se derrumbaba antes de ser construido.

Antes de notar un esbozo de sonrisa, veía dolor en sus labios. Antes de ver sus manos tomando amorosamente las propias, la derecha le daba un golpe en la mejilla. Se acabó el tiempo de pensar. En realidad, nunca lo hubo. Lo que en realidad acabó fue su falsa esperanza de corregirlo todo.

La mano temblorosa tocaba la piel golpeada, mientras veía su hermoso pelo alejarse por la acera. Más penumbra, y las luces ya se difuminaban con la oscuridad.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Cada y cuando

Cada y cuando, un simple grillo no hace sonar su típico sonido chirriante y horrible, sino que verdaderamente utiliza su boca para entonar canciones tan bellas que no se pueden traducir a ningún lenguaje humano.

lunes, 29 de noviembre de 2010

La evolución de las especies.

No es un simple "me desagrada".

Me da asco, odio y lástima. Patético. Es increíble rebajarse
hasta tal grado. Ningún animal, ninguna maldita bestia lo
haría. ¿Cómo es posible que haya semejante imbecilidad?
¿Cómo es posible que el cerebro humano permita concebir
tales barbajanerías viles y vomitivas?

Decidido. Dejo de ser persona para convertirme en un
gorila.

martes, 23 de noviembre de 2010

El Olivo

Hacía calor, y la cerveza que había pedido minutos antes aún no le generaba
ningún tipo de sensación refrescante. Tremendo momento éste para visitar
una playa tan hermosa.

De pronto una mujer se acercó a su mesa. Se sentó.

Pensó que la mujer se le quedó viendo por un rato (sus lentes de sol no le
ayudaban a confirmar su hipótesis). El reflejo sugería un mirada fuerte pero
su rostro era suave y delineado. Era una interesante contradicción. Lo que
más le sorprendía era cuánto la analizó en tan poco tiempo. Le preocupó
que tal vez se quedó viéndola con una mirada boba.

Tenía algo familiar en su rostro.

Sin más, la mujer sacó una pluma del bolsillo, tomó una servilleta y anotó
rápidamente. Esos minutos que estuvo escribiendo sobre el papel le sir-
vieron para verla más detenidamente en lo que parecieron horas de
observación. Era como ver al Sol. Sus pupilas le suplicaban que se
detuviera. La mujer terminó la nota y se fue.

Al hombre lo mataba la curiosidad el ver qué había escrito pero pensó
que era solamente una propuesta para verse en algún hotel cercano
para pasar la noche.

Arrugó la servilleta y se divirtió quemándola con su encendedor.



"Te busqué por años. Probablemente no te acuerdas de mí. Soy Susana.
Te conocí de joven. Preparatoria. Nunca tuve la fuerza para poder decirte
que me fascinabas. Tuve que buscarte por mucho tiempo.

Espero que me recuerdes. Si lo haces, estaré en el restaurante El Olivo
desde las seis. Me gustaría hablar contigo. Me encantaría.

Susana"

lunes, 22 de noviembre de 2010

shorts

Cada que dan las doce en mi reloj, no puedo evitar pensar
que yo podría ganarme la vida despertando princesas de
sus sueños profundos. Tan sólo un beso.

Se oyó de entre la muchedumbre un personaje que gritó:
"¡Soy el rey del Universo!". El rayo que partió al hombre en
miles de pedazos no se hizo esperar.

No lo pudo haber visto con sus ojos porque le atemorizaba
el quedar ciego por sólo observarlo un segundo. Pero su
recuerdo era tan real... podía sentir sus pupilas achicharrarse.

No hay nada aquí que te detenga. Corre. ¿Qué esperas?
¡Vete de aquí! ¿Qué me ves de bonito?

jueves, 4 de noviembre de 2010

La vida es todo

La vida es todo con un "nosotros".

La vida es todo con un suspiro que clama "te quiero".

La vida es todo con unos ojos que te ven al despertar.

La vida es todo con un golpe de realidad que te grita "por qué".

La vida es todo con un sueño cristalizado.

La vida es todo con una mujer a tu lado.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Linda

Dos feas urracas se acercaron a donde estaba él sentado. La verdad es que sólo fantaseaba sobre una hermosa historia de amor... Ya saben: el hombre da la vida por su amada, la mujer se da cuenta del infinito amor que él le profesa con ese valeroso acto, el hombre sobrevive... los dos viven felices por siempre (no sin ciertos baches en la relación, pero nada que una linda flor y palabras correctas no puedan curar).

Seguía viendo a las negras urracas buscar migajas en el suelo adoquinado de la plaza. "¿Le gustará el arte? No sé si pudiera casarme con una mujer que no pudiera apreciar una pintura de Goya o de Manet... La música también sería un problema... ¿Qué tal si sólo le gusta esa "onda" de rock moderna? ¿Acaso podrá aguantar mis vinilos de Liszt o de Chopin? Probablemente habrá tiempos difíciles donde faltará dinero... Lo entenderá, ya que no se casaría con un escritor sin saber pros y contras. Más contras que pros, hay que aclarar."

Esos ojos redondos y negros de las urracas le recordaron los lindos ojos cafés de la mujer. Tan suaves y brillantes a la vista. Podría enternecer hasta el más cruel de los dictadores con un pestañeo. Vio las plumas negras de las aves del parque y pensó en su largo pelo castaño... Un ondulado parecido a las olas del mar más tranquilo del Caribe. Linda.

"Siendo tan hermosa debe ser muy instruida. La belleza es garantía de cultura... En algunos casos. Pero no puedo estar equivocado... ¿Cómo estar equivocado con semejante mujer?"

Las urracas parecían pelearse por un pedazo de pan. "Es una lindura. No podría lastimar a nadie. A esa cara yo no podría soportar verla enojada. Sería mi final. ¿Hacerla entristecer? Jamás. Antes muerto."

"No hay más que pensar. Ella es."

Sonreía, mientras veía como las urracas volaban hacia el Sol como si quisieran derretirse bajo sus rayos.

domingo, 24 de octubre de 2010

Pensamientos y las nulas causales de Éurito el centauro.

“…”
Debo aceptarlo: soy un monstruo. Yo no decidí lo que sería de mi vida. Nosotros estamos malditos desde la cuna. Desde el principio sabía que algo feo iba a terminar conmigo. Detrás de nuestra imagen solemne y autoritaria se esconde un alma débil a las tentaciones del mundo. Y es por el simple hecho de que nosotros debemos hacer lo que el destino nos obliga a hacer: Emborracharnos, raptar y violar mujeres. ¿Alguna vez se preguntaron si en realidad nos gusta hacer eso? Las personas nunca se molestaron en preguntarse o al menos aclarar si todos nosotros éramos iguales. Porque sabían que somos idénticos. Uno más grande que otro tal vez, pero todos igual de borrachos, secuestradores y violadores. El destino nunca se molestó en crearnos una personalidad única a cada uno de nosotros. ¿Flojera? No sé. Pienso que fue solamente para hacernos sufrir. Para seguir embriagándonos y pelearnos. Ah sí, pelearnos era lo que se me olvidaba. Nos “gusta” pelear. Básicamente es por los efectos del vino, y sucede a menudo. Si por mi fuera, hubiera preferido el no existir. Desaparecer. No le hacemos ningún bien a nadie por estar aquí… Supongo que desaparecer podría contribuir en algo a la sociedad. Sí… Sólo somos unos monstruos sin causal. Y mientras pienso esto me emborracho y estoy fijando mi atención en esa joven de por allá… Vamos a ver si puedo provocar una pelea, y con un poco de suerte, morir rápido.
“…”

domingo, 17 de octubre de 2010

México

"En serio no puedes pensar que esto va a regresar a la
normalidad. Han sucedido demasiadas cosas como para
poder evitar pensar en ellas y hacer como que nunca
pasó nada."

"Oye, voltéame a ver a los ojos... luego pienso que me
sigues ocultando algo."

"No es posible que sigas con esa misma actitud." "...Y
tampoco pongas esa cara lastimera, que pareces perro."
"¿Estuviste jugando conmigo todo este tiempo y esperas
un perdón? Realmente estás jodido." "¡¿Qué querías que
hiciera?! ¿Que me hiciera la pendeja mientras tú te
divertías de lo lindo? No cabrón, no soy así."

"No me hagas sentir mal de esto. Te lo tienes bien mere-
cido... ni pongas esa cara." "...No, bueno, tal vez sí reaccio-
né exageradamente... pero no puedes decir que tu te...
bueno no fue tanto, es verdad... lo siento, sí me pasé
de la raya. Sólo quiero que no vuelva a suceder ¿está
bien?" "Sí perdón, no vuelvo a reaccionar así ¿me puedes
perdonar? Creo que sí me pasé... está bien, sí me pasé."

"¡Discúlpame! Trataré de mejorar, lo prometo... Vamos
a cenar o algo así. Yo invito... sólo perdóname."

martes, 12 de octubre de 2010

Por tu futuro bien.

Sufrió como cualquier otra. El típico nudo asfixiante:
preámbulo de la primer lágrima que su ojo soltó con
mucha queja. Empezaron los sucios movimientos in-
voluntarios de las comisuras de su boca. Sentía que
algo en su pecho se encendía. Un tifón de emociones
convertido en millones de gotitas saladas que la mujer
sin reparo soltaba.

domingo, 10 de octubre de 2010

Cáncer

Silencio no era. Ruido tampoco. Era una especie de asfixia que
llenaba cada mínimo espacio del bosque. Estaba en todos lados
sin saber que lo estaba. ¿Brisa? No. ¿Gritos de pájaros? Ninguno.
¿Rechinido de las hojas? Tampoco. Ese Todo era nada. Ese Todo
se escapaba de los límites de los objetos. Sus manos inexistentes
estrangulando al bosque, quitándole su verde intenso.

Ahora sí fue ruido. La tierra se movía. Se hizo un sonido como de
succión. El lodo y las hojas secas comenzaban a hacer formas ana-
tómicamente humanas. Salieron unos brazos de esa interminable
succión que llenó de ruido al bosque. Algo andaba mal. Algo ras-
caba y desgarraba los adentros del bosque. El Todo tenía una cara
monstruosa y totalmente perfecta. Salió de ese hoyo de donde
se formó.

Un pájaro se posó en uno de los árboles del bosque, mientras
que la brisa pegaba con dulzura a las hojas, haciéndolas sonar.

El Todo lloró.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Cruzaste la línea.

Cruzaste la línea, y pensaste que te ibas a salir con la tuya.

Qué equivocada estabas.

No saldrás bien de ésta. Lo que te tengo preparado no es
digno de comentarse. Cruzaste la línea y ésta fue bien defi-
nida desde que nos conocimos, desde que esa misma tarde
te avalanzaste sobre mí sin saber siquiera mi nombre.

Fue tu error conocerme. Fue tu error el haberte arriesgado
a conocer un simple desconocido en un bar desconocido.
¿Quién en sus facultades cerebrales intactas se le ocurre
empezar una conversación con alguien que no demuestra
ni ganas de estar en ese lugar? Es cierto, yo no buscaba
hablar contigo. Nuestra conexión surgió de la casualidad
y que además tú estabas demasiado borracha como para
pensar en la estupidez que estabas cometiendo.

Y cuando pensaba que nuestra conversación casual iba a
terminar en solamente eso: una conversación casual entre
dos borrachos, te atreviste a enviarme señales que hasta
la fecha recuerdo...

Y es que tu pelo es hermoso. No esperabas que no me diera
cuenta de cada vez que te quitabas el pelo de la frente para
ponerme la atención de millones de personas en tan
sólo un par de ojos negros. Te quitaste el pelo de la frente
diecisiete veces en la hora y media que estuvimos en el bar,
y que rápidamente el tiempo ahí comenzó a endurecerse...

Ahí fue cuando cometiste el peor error de tu vida: me invi-
taste a tu departamento. De ahí en adelante todo fue placeres
diarios. Nunca te molestaste en saber mi nombre. Nuestra
conversación casual se convirtió en una relación casual que
ni se molestaba en los saludos ni las despedidas. Directo al
grano.

Te cansaste. Yo me había terminado acostumbrando a esa
relación sin nombre. Me gustaba de vez en cuando. Terminé
amándote, aún cuando no sabía ni tu número telefónico. Te
cansaste, viste a otros: la misma historia. Pero cruzaste la
línea imaginaria que dibujé para los dos en nuestra relación
sin compromiso. Y no le deseo a nadie lo que te va a suceder.

domingo, 19 de septiembre de 2010

unos bellos enebros

Claro, no siempre fuí la triste caja de madera podrida que
soy ahora. Antes me podía hacer llamar un verdadero hogar.

Hubo buenos tiempos. Yo era cien enebros hace cien años.
Extraño esos tiempos. Mi vida era la brisa del bosque, sin
presiones, sin esfuerzos: el sólo balanceo de mis cuerpos,
acompasados con miles de árboles más. Éramos una bella
compañía de enormes bailarines paralíticos.

Lo feo llegó con el monstruo de la naturaleza: el hombre.
Hicieron a mis cien cuerpos uno solo. Una sola estructura,
fija, rota, desnuda. Una orgía no buscada. Una unión anti-
natural.

Lágrimas de savia humedecieron mis cuerpos destrozados
por el hombre.

El consuelo llegó más tarde. Fuimos hogar. Y no un hogar
cualquiera: éramos hogar de una hermosa familia. Jóvenes
padres con sus dos hijos. Su cariño calentaba hasta las más
pequeñas fibras secas de mi interior. Fue un volver a ser
feliz, un volver a ser cien enebros unidos, tomando el
momento como un pasado vagamente recordado.

No duró mucho. Se fueron y olvidaron el hogar que los vió
ser felices por un rato. Una felicidad tan fugaz, que no se
podía considerar como tal. Fue un pequeño placer dentro
de la tortura fija de ser estructura.

Es estar en una hoguera que no acaba: una gota de agua
mojándonos la lengua, recordándonos el placer de las
pequeñas cosas en la vida.


Vino la putrefacción a quitarnos la unidad que parecía eterna.
Y de alguna manera, dentro de ese alivio de salir de la unión
asquerosa a la que los enebros fuimos sometidos, vino la tris-
teza a recordarnos que no todo es malo. No todo es bueno.
Todo es un feo gris que ciega nuestras expectativas.

Terminamos siendo un esqueleto de lo que en algún tiempo fue:
unos bellos enebros, una monstruosa estructura, un hermoso
hogar, una vieja y triste caja de madera podrida que solía llamar-
se casa.

C'est la vie.

lunes, 13 de septiembre de 2010

calladito calladito.

-Yo a usted lo veo como un padre para mí Don Ignacio.

-La mera verdad, siento que usted es muy bueno para
escuchar. Siempre cuando tengo un problema, usté
siempre está en el mismo lugar...

-Calladito calladito, como desde el accidente, pero
bueno para escuchar.

-Sé que no le doy tiempo para que usted me hable
de su vida, pero como usted es tan callado, pues me
veo en la necesidad de hablarle todo el tiempo. Por
eso es usted como un padre para mí Don Ignacio...
Siempre me ha oído cuando tengo algún problema.

-Ojalá hablara Don Ignacio... Haría las cosas mucho
más fáciles.

-Don Ignacio, yo a usted lo quiero mucho. Mi padre
nunca estuvo aquí para ayudarme cuando tenía dudas...
Él tenía un problema con la bebida ¿sabía usted? Le
pegaba a mi mamá y yo nomás me quedaba ahí en la
esquina, calladito calladito, como usted ahora lo está.

-Siento que podría hablar con usted horas Don Ignacio.
Se me hace muy fácil poder hablar con usted de cualquier
cosa... Como que le tengo mucha confianza. No sé ni
por qué.

-Le diré un secreto Don Ignacio. En un mes me caso. Sí,
la señorita de la que le hablé ¿se acuerda? pues le gusté y
ya tengo el permiso del papá. Estoy muy emocionado Don
Ignacio...

-Ojalá pudiera estar usted en la fiesta... Es una
tristeza que usted esté tan calladito.

lunes, 6 de septiembre de 2010

el cigarrillo a medio acabar

Un cigarrillo a medio acabar puede significar muchas cosas:

1. Te acaban de dar una mala noticia, y no pudiste evitar
dejar caer el cigarro de la boca por la sorpresa.

2. Te acaban de dar una buena noticia, y no pudiste evitar
dejar caer el cigarro de la boca por la sorpresa.

3. Acabas de ver a un conocido al que no le gusta que fumes.

4. Acabas de sentir ganas de vomitar por el agrio y áspero
humo que pasa por cada rincón de tus pulmones.

5. Te dolió la cabeza.

6. Tu mujer acaba de darte una buena cachetada.

7. Tu mujer acaba de decirte que te odia.

8. Tu mujer acaba de decirte que te ama.

9. Más que nada, un cigarro a medio acabar significa
un placer detenido con la brusquedad de una situación.

Probablemente el cigarrillo que acabas de ver tirado en la
calle pudo haber sido testigo de una interesante historia.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Lina

Quiero llorar. Quiero llorar porque no puedo avanzar.

Estoy atorado en el mismo lugar. Sin rutas ni ayudas,
no puedo concretar un final. Estoy en el mismo lugar.
Hay salida, pero no la quiero encontrar. Estoy perdido
porque quiero.

Es lo más triste de todo. Estoy en esto sólo porque quiero.
Estoy perdido por gusto. El gusto superó al bien. El placer
tiene una fuerza increíble.

Hay que luchar. Hay que luchar para poder salir adelante.

¿Se puede? Claro. Sólo hay que aclarar la mirada y buscar
el final.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Una mesa y una mosca.

Tronaba como nunca afuera del pequeño departamento de Rosa.

Dentro del pequeño departamento lo único que se oía eran los
golpes húmedos de la lluvia contra los cristales. Rosa prendía
un cigarrillo, mientras el hombre la veía desde el otro lado del
cuarto.

Estaba sentado. Un vaso caliente de whisky en la mano. Sólo
removía su contenido: su mirada fija en Rosa. Una mosca se posó
en la mesa que separaba a la mujer y al hombre. Una mesa y
una mosca.

Rosa se sentó y prendió otro cigarrillo. Aún cuando los sepa-
raba la mesa y la mosca, había en el aire una cierta tensión:
Los dos no se atrevían a murmurar palabra. Se regodeaban
en el sepulcral silencio que los separaba pero que los unía
más que nunca, en ese pequeño departamento de un séptimo
piso de un edificio cualquiera.

Se sabe que el mundo no se detiene sólo por algo que le
sucede a un ser humano. En este caso, el mundo hizo una
excepción, deteniendo su movimiento eterno y manteniendo
la misma hora, el mismo minuto, el mismo segundo.
Disfrutando la pasión del instante, el intenso dolor de los
dos contendientes. La lujuria que encendía los ojos claros
de ambos.

Dos instantes eternos. Dos humanos unidos por la pasión
que los unió hace tiempo atrás. Dos cuerpos sin alma, ven-
dida hace tiempo ya, al diablo. Una mesa y una mosca.

Se oyó otro trueno fuera del departamento. La mosca voló.

El hombre y la mujer se avalanzaron uno al otro en deses-
peración, hartos del momento, hartos del dolor. Buscaron
en ellos mismos un frustrante alivio, mientras los dos
instantes se fundían en uno solo.

domingo, 22 de agosto de 2010

introducción a la paranoia


Cuando recuerdas que debes respirar y es un rítmico acompasamiento
que no te deja pensar en otra cosa mas que seguir viviendo. Respirando.


Nunca pensó que este tipo de cosas sucedían en la vida real.

Pero saliendo del trabajo sucedió.

Se paró por un café en la tienda de a lado. Salió. "Mejor camino a casa,
el metro a estas horas está a reventar." Caminó. Se tomaba en pequeños
sorbos su café. Mucha azúcar, como le gustaba. Iba tarareando en la mente
"i'd soon rather be dead, sleeping six feet in the ground". Era la única
parte de la canción que se sabía.

Cruzó un semáforo en verde, asegurándose de que no se acercaba ni un
auto. Dos personas hicieron lo mismo. Al parecer iban al mismo lugar
que él.

Dobló la esquina. Los dos hombres doblaron la esquina. Subió el puente
peatonal para cruzar la avenida. Los dos hombres subieron el puente pea-
tonal para cruzar la avenida.

Siempre imaginaba que ésto era producto de la imaginación de algún
director de películas sobre la época de los gángsters. Pero no:

¿Secuestradores en su tranquilo Monterrey? Imposible. México en
sociedad siempre veía al norte como el "primo incómodo" que ganaba
más que los demás primos. Asi que ¿cuál era la razón para la que
hubiera secuestradores en provincia, cuando siempre las noticias
de los asesinatos y "levantamientos" eran únicamente del Distrito
Federal?

No podía ser... Estaba ya en su calle, y los hombres seguían la misma
dirección. El hombre se cansó y trotó hasta llegar al porche de su casa,
sacó sus llaves con nerviosismo. Se le cayó el café en su lucha contra
la gabardina: terca para quedarse con las llaves del hombre.

Se imaginó a sí mismo cuando llegó totalmente ebrio a su casa hace
dos o tres noches y que no podía abrir la puerta por la torpeza de
su mano al intentar insertar la llave en la ranura de la perilla.

Por fin entró a su casa. Cerró con fuerza la puerta y se quedó en
la entrada por varios segundos.

Sintió que tocaban la puerta. No podía ser. No lo puedo creer.
Qué descaro. Pasaron por el porche de su casa y se atrevieron
a tocar la puerta. En la mente del hombre pasaron mil imágenes
de películas: torturas, autos, gritos, dolor, disparos, muerte.

Tocaron de nuevo la puerta.

Abrió la puerta con miedo.

-¡Qué tal señor! ¿Ya oyó la buena noticia?

viernes, 13 de agosto de 2010

la cigarra

Había una vez, una pequeña cigarra muy simpática, que cuando
aprendió a hacer su sonido chirriante se volvió muy feliz.

Pero un fatídico día se dió cuenta de que todos sus hermanos y
hermanas cigarras hacían el mismo sonido que ella, lo cual
la entristeció profundamente hasta el grado de considerar llamar
a la línea caliente suicida.

Poco tiempo después se dió cuenta que podía cantar hermosa-
mente. Durante algunos meses practicó en secreto en tiempos
libres que tenía entre su trabajo y su familia.

Al fin, en una fiesta de la colonia les reveló a todos su secreto.
Sin esperar reacción alguna de sus vecinos comenzó a cantar.

Cantó como nunca antes había cantado en su cortísima vida.
Cantó "El Rey" y pegó todas las notas de la canción: podría
decirse que cantó mejor que Vicente Fernández, incluso me
atrevería a decir que mejor que Don José Alfredo Jiménez.

Hasta el último verso, la pequeña cigarra dio lo mejor de sí
misma... Puso toda su energía en cada una de las palabras que
cantaba "¡Y mi palabra es la leeey!"

Al terminar de cantar la cigarra, totalmente exhausta,
volteó a ver a su sorprendido público, quienes al notar su
gran originalidad juzgaron correcto llevarla a juicio, donde
un tribunal de cigarras la condenó a la pena de muerte por
su "alteración del orden público y por su falta a la moral".

En su solitario funeral se oyó en la radio "El Rey"... No sin
poca interferencia con la única otra estación que había en el
país después de que el presidente expulsó a las demás del aire.

(you hear indistinct chattering up above)

Sólo sé que en este momento estoy en mi cuarto, oyendo a mi madre
y a mi abuela hablando de temas de actualidad y de la farándula
mexicana.

(Me pongo los audífonos)

Ahora sí. Bien, pues qué les diré. Básicamente esta semana ha sido
de mucho movimiento: Acabo de entrar a carrera y el cambio es
como cortarle el cordón umbilical a un niño que toda su vida ha
estado en un solo colegio. Un niño que después de depender de
los nutrientes que le proporcionaba la madre tiene que dejar esa
"casa" tan confortable y tan segura, para que ahora tenga que
enfrentarse al mundo exterior: el Tec.

Ése es el cambio. Y es lo único mas bien. Mi vida ha sido una
una vida cercana a la monotonía y la costumbre, pero todos los
detalles que la conforman son lo suficientemente emocionantes
para considerar que mi vida ha sido divertida.

Me estoy tardando mucho en escribir esta entrada. Culpo a la
música. Me distrae demasiado. ..."i am yours now"...

Necesitamos algo de aire en la tierra. Necesitamos un querer
hacer las cosas solo porque sí. Necesitamos un empuje maravilloso
pero monstruoso en proporciones. Se necesita gran fuerza
para poder hacer lo que se tenga que hacer en la tierra.

Busca en todo lo que hagas ese detalle que haga emocionante tu vida.
¿Para qué vivir si se vive por vivir? Qué hueva.

Sólo sé que en este momento me estoy despidiendo del blog
y de mis lectores (ya quisiera)... sigo oyendo los fantasmas de
las voces de mi abuela y mi madre, mientras en los audífonos
se escucha ..."would you always? maybe sometimes?"...

jueves, 5 de agosto de 2010

querido blog:

Querido blog:

¿Acaso me he vuelto aburrido? ¿Acaso terminé siendo un estirado más, de esos
que les gusta molestar a la gente sólo para satisfacer su patética y hueca diversión?
¿Acaso me he vuelto demasiado serio? Tengo tantas preguntas y no quisiera
importunarte con todos mis problemas.

Lástima que no existes y que sólo eres un montón de bits que están hechos para
obedecer a los humanos (Gracias a Dios por la sumisión digital: me recuerdan
a la cultura machista mexicana y su desprecio hacia las mujeres).

Lástima que no me oyes, lástima que no puedes entender verdaderamente de lo que
hablo (y escribo), pero en fin, estás para lo que existes: para dejar que te tatúe con mis
palabras aburridas, estiradas y sin sentido. Malo para ti, bueno para mi.

Volviendo a la pregunta retórica que te hice hace unos cuantos párrafos... Oh querido
blog, ¿Soy aburrido? ¿El ahí no es ahí? ¿La vida es acaso sólo un conjunto de chispazos
de energía? ¿En algún momento aprenderé a acentuar correctamente todas las palabras
del léxico castellano?

Querido blog, no sé ni cómo me aguanto yo mismo. Francamente si no tuviera tu
inexistente ser creo que me exiliaría a mi mismo para vivir como ermitaño por el
resto de mis días (que probablemente sean sólo chispas de energía que durarían
24 hipotéticas horas).

En fin, quiero agradecer tu espíritu de servicio hacia los demás, con tu actitud de
mujer mexicana sumisa y los 20 mil millones de bits que te conforman. Y como
dirían jóvenes de mi generación (una gran bola de descerebrados con poco
o nulo léxico):

Nunca cambies.

lunes, 26 de julio de 2010

Parecía tan lejos.

Ya era tarde. El sol ya no se asomaba por los cerros y sólo quedaba su huella... unos cuantos rayos aún buscaban su lugar en el valle pero la Luna hizo que desistieran en el intento. Era esa hora del día en que no sabes si deberías alegrarte o entristecerte de su llegada. Una hora muerta. La hora perfecta para enterrar a un muerto.

Alejo estaba echando tierra sobre el cuerpo de Don Raúl con la pala. No había nadie que pudiera presenciar esto además de Alejo y los cerros, ya totalmente negros, vestidos de luto.

De la frente de Alejo caían gruesas gotas de sudor, aún cuando la noche auguraba una helada. Pero el joven seguía echando tierra y piedras sobre la tumba del viejo. El frío viento suspiraba y pasaba por entre los brazos de Alejo quitándole las ganas de seguir. De vivir.

De los ojos de Alejo comenzaron a salir pequeñas lágrimas contenidas. Intentó esconder su dolor bajo el sombrero y se secó las lágrimas con su camisa. No quería parecer aflijido por la muerte de Don Raúl.

Alejo dejó la pala por un momento para respirar. El viento seguía soplando en el valle y lo poco o nada de hierba que había en él parecía desprenderse de la tierra. La tierra sobre el cuerpo del viejo comenzó a removerse y hacer pequeños remolinos, descubriendo algunos dedos y la frente de Don Raúl.

“Parecía tan lejos. Este día se veía tan lejano, como si no fuera a pasar nunca. Uno pensaría que moriría antes yo que el cabrón de Don Raúl. No la vi venir. Parecía tan lejos. Don Raúl tenía cara de viejo desde que lo recuerdo, pero nunca lo veía cansado... ¿Huevón? Antes muerto, decía él... Qué frío hace.”

La cara de Don Raúl ya estaba totalmente descubierta. Tenía el ceño fruncido. Alejo
volteó la cara: “Aún quietito sigue dando miedo... Pero este día parecía tan lejos...”

Las nubes se movían rápidamente de su lugar. El viento empeoró... El cuerpo de Don Raúl ya estaba totalmente descubierto y Alejo sólo veía el cadáver... Alejo, con su cabeza bajo los hombros, se cubría la nuca con el cuello de la camisa: “Tan Lejos...”

Una corajuda ráfaga de viento levantó a Alejo del suelo, arrojándolo al pozo donde Don Raúl debía estar descansando en paz.

Continuas ráfagas de aire comenzaron a llenar la tumba de tierra durante algunos silenciosos minutos hasta que no había rastro de que alguna vez alguien haya cavado una tumba para su padre en ese lugar.

Los cerros empezaron a pintarse de verde, mientras que el sol rasguñaba el alba. El viento poco a poco se iba muriendo, al tiempo en que la luz inundaba la tierra fría del valle con calor. Se podían oír los últimos suspiros del viento diciendo “lejos... lejos...”

jueves, 22 de julio de 2010

lunes, 19 de julio de 2010

tiritar. una palabra que habla más de marionetas que de frío.


Estoy, en este momento, entrenando para nada en específico.

En la computadora se oye "love like a sunset part ii" de phoenix,
una canción que no cumple con los requisitos de "canción para
entrenar", por lo tanto le cambio (recordemos que mi iTunes
está en modo aleatorio y puede aparecer cualquier canción) y
me aparece "paper" de rafter... Es algo más adecuado pero no me
convence.

En fin, debo decir que estas vacaciones han sido de gran provecho
para mí en todos los sentidos. He visitado playas mexicanas con
sus consecuentes visitas a clubes nocturnos (en Cancún notarán
que las mujeres bailan de una manera... única).

Así también ha sido un período de gran inspiración literaria. Nunca en
todo el tiempo que llevo haciendo intentos de cuentos se me han
ocurrido tantas ideas como ahora. ¿Se deberá a que ahora estoy
leyendo mucho más? Probablemente.

De todas maneras acabo de aprender del gran maestro Saramago que
"la primera condición para escribir es sentarse y no estar esperando a
que te llege la inspiración." El factor clave para poder escribir es quererlo
siempre: buscar en todo momento oportunidades para limpiar tu cabeza
y escribir lo que te venga en mente.

Tengo en este momento tres cuentos. Uno está totalmente estático. Creo
que no pude encontrar un buen desenlace para él y probablemente se va a
quedar como un archivo inconcluso en mi computadora. El segundo va
por buen camino: lo comencé hace poco, mientras leía a Rulfo me lle-
gó la idea y está casi por terminarse. El tercero, en cambio, es sólo una idea
pero que promete ser el único cuento decente que haya salido de su servidor.

En fin, mientras llego a mi última serie de lagartijas y en la computadora se
oye "australia" de the shins, me retiro, no sin quedar inconforme con la elección
aleatoria de melodías en iTunes.




jueves, 8 de julio de 2010

miércoles, 30 de junio de 2010

Aquello que más tememos está cerca de nosotros


Puedo comparar la oficina con una criatura enorme, cuadrada, gris.
Como sin vida pero capaz de actuar y hacerte daño.

Un ser que succiona cualquier tipo de idea creativa de tu mente y la
convierte en monotonía. Sofocante pero fría monotonía. Te mantie-
ne en un estupor helado que se asemejará a encontrarse perdido en
un grande bosque invernal. Un hambriento lobo te mira con los
ojos inyectados en sangre, vicioso, asesino, fijo en su presa.

Tú te encuentras solo, desmoralizado, listo para ser devorado por esa
masa enorme gris, llamada oficina.

Sin embargo, el lobo no te mata. Te deja herido de muerte, con falsas
esperanzas de que podrás sobrevenir esta crisis creativa. No es así.

Al siguiente día seguirás llendo (con la monotonía de ayer) a la boca del
lobo, quien estará hambriento de creatividad.

martes, 29 de junio de 2010

“Análisis y estudio del comportamiento humano (rambling o divagación)"



Permítanme comenzar con una breve definición de lo que la palabra “análisis” puede significar:


“Es la descomposición de un todo en partes para poder estudiar su estructura, sistemas operativos o funciones.”

Si piensan que ésto es un plagio descarado de la página que todos conocemos como wikipedia, déjenme decirles una cosa: soy hijo de mi tiempo. Es normal utilizar esta página como la primerísima base de datos a la que confiamos nuestra poca inteligencia, agraviada además por las diversas facilidades que la computadora y el internet nos ofrecen.

Nos estamos haciendo flojos. El resultado de nuestras acciones es fruto de las capacidades físicas y mentales que tenemos. Somos demasiado “no tontos” como para estar desaprovechando la ayuda que la propia naturaleza del hombre de buscar-la-eficiencia-a-toda-costa nos ofrece.

Porque la inteligencia en nuestra época es severamente criticada. ¿Quién no ha recibido burlas descaradas de sus compañeros de trabajo o de estudio cuando buscaba decir algo brillante? No señor, aquí no se puede hacer eso, no está bien lo que piensa, enfóquese en lo que está haciendo y no haga preguntas ni comentarios bobos.

Esto no ayuda al crecimiento mental, ni tampoco a nuestra autoestima y seguridad en nosotros mismos. Hay que decirlo también, dependemos demasiado de lo que hacen los demás. Probablemente nuestra especie se extinguiría si los suicidios colectivos comenzaran a ser una moda popular.

No somos idiotas como para arrojarnos al pozo sólo porque nos dicen. Pero si alguien más se tirara con nosotros no tendríamos problema alguno para hacerlo. ¿A quién se le ocurrió la magnífica idea de que las horrorosas “crocs” son la moda ahora? Si un servidor fuera asesino serial y no escritor se dedicaría a buscar y desaparecer a todos y cada uno de los seres humanos que tuvieron algo que ver en el desarrollo y creación de esos monstruos que se atreven a llamar calzado. Y aún cuando están feos (por no poder encontrar una palabra mas adecuada para descibirlos físicamente) y caros, las personas los compran a montones porque “todos los usan”.

Es difícil para la gente común (llamémosles incapaces) entender lo que es una estrategia de mercadeo. Una estrategia de mercadeo es básicamente una táctica utilizada por las empresas para convencer a los incapaces que su producto es el mejor. Y créanme cuando les digo que las estrategias de mercadeo funcionan de maravilla, sobre todo cuando son aplicadas en países como China. Sí, este país asiático con una quinta parte de la población mundial es el lugar perfecto para obtener dinero sin gastar demasiado en estandarización de calidad.

A los chinos les puedes vender virtualmente cualquier cosa que tu empresa haya creado y que aún no esté listo para producción en otra parte del mundo. Te invito a que lo intentes: busca vender algo por internet a China y si tu producto brilla o hace sentir a los chinos algo “chistoso” en su estómago al comerlo, créeme que te harás millonario. Sin ahondar mucho en detalles, los chinos son como una masa uniforme que actúa en conjunto. Tienen un cerebro en común y no pueden actuar conforme a su “existencia individual” (si es que se le puede llamar así).

¿Qué aprendemos de todo esto? La cultura del hombre del siglo veintiuno es de extremo ocio y menor esfuerzo, así también que dependemos de nuestro grupo social para actuar (todo sea conforme a la moda). Con esto llegamos a las estrategias de mercadeo y su gran éxito con gente incapaz y especialmente con los asiáticos, que son en realidad un cerebro simple que controla a los más de mil doscientos millones de... de... no se qué son exactamente.

¿Cambiaremos nuestra actitud? Sólo si no nos cuesta demasiado trabajo hacerlo.

miércoles, 9 de junio de 2010

los ladrones.

-Piensa tan sólo un momento en lo que vamos a hacer.

-¿Estás totalmente seguro del resultado?

-¿No hay variables probables?

-Sólo ponte las botas y vámonos Gabriel. Deja
de pensar tanto. Usar tanto la chaveta te hace daño.
Y por favor ya no hables con palabras domingueras
que ya me siento tan güey como Chava el de la plaza.

-Anda tu... tú bien sabes que el garañón de don Rubén
es bravo como la fregada y no va a estar fácil meterlo
a la traila sin que se den cuenta los vaqueros.

-Tú solo hazme caso Gabriel. Ahora, ponte las botas y
pásate el mecate aquel pa' poder agarrar al caballo,
que se nos hace tarde.


martes, 25 de mayo de 2010

"la hora"

Y corrió, porque el mundo no la dejaba en paz. Buscaban
constantemente mantenerse al tanto de ésta, hasta que
hubo un momento en que ya no podía más.

Se sentía desconsolada. Utilizada.

Había un dejo de sorpresa en su mirada al ver el amanecer.
Pensaba que aún le quedaba tiempo a la noche.

jueves, 20 de mayo de 2010

el largo camino a ningún lado.

...solo imagina.

un auto.
tanque lleno.
unos buenos lentes de sol.
un ipod cargado con buena música.
comida chatarra en exceso.
un six de cerveza.
amigos.

¿qué esperas para irte?

miércoles, 19 de mayo de 2010

hm.

mucha gente identifica la música como una manera de
expresar lo que siente o a lo que pertenece.

debo decir que acabo de regresar de una visita infructuosa
a la tienda de música. sí, la verdad es que nunca encuentro
nada DECENTE. y con decente me refiero a música nueva al-
ternativa, no estupideces como justin bieber o cualquier can-
tante pop mainstream (que es lo único que se oye en el radio).

ahora, debo decir que intenté buscar bandas alternativas en
la sección de música alternativa (suena congruente), pero cuál
fue mi sorpresa al ver bandas como Korn, the Rasmus, Marylin
Manson, entre otra mierda "medio" mainstream, así como
gente retro como Hendrix (el papá), Led Zepp (el otro papá),
Pink Floyd (el abuelo de los papás), etc, etc.

así llego al punto de esta entrada:
¿cuándo podré encontrar música realmente ALTERNATIVA
cuando en las tiendas se les considera alternativos a Led o
Hendrix? (evito comentar sobre Manson y esos pendejos
porque en realidad no valen la pena) ¿cuándo se les va a dar
su correcto lugar en las tiendas de música a bandas realmente
alternativas? si se sigue pensando que "lo bueno sólo en los
setentas" (que yo pensaba así hasta hace poco, lo debo confesar)
nunca podremos conocer verdaderamente buena música alter-
nativa. debemos darles una oportunidad para poder descu-
brir que la música de hoy tiene potencial (no la música main-
stream, debo aclarar).

...


martes, 27 de abril de 2010

la vida de un pez dorado es triste (memoria de 3 segundos).

...¿por qué no puedo ir más allá de esta barrera invisible?

...¡pzschhh!

...¿por qué no puedo ir más allá de esta barrera invisible?

...¡pzschhh!

...¿por qué no puedo ir más allá de esta barrera invisible?

...¡pzschhh!

...¿qué soy exactamente?...

...¡¡¡pzschhh!!!

jueves, 15 de abril de 2010

de actitud y otras tonterías.


clac.

la imponencia de una mujer se mide en cuánto (y de qué
manera) sus tacones resuenan al golpear el suelo.

uno se puede dar cuenta fácilmente de una mujer con las
mismas características mentales dictatoriales de Hitler
(quien no usaba tacones) al oír cómo sus taconazos impo-
nen sobre el sonido general de una fiesta, misa, funeral o in-
cluso hasta en un estadio.

podemos encontrar una dama respetable y cortés cuando
vemos que al tocar el piso con su calzado intenta hacer
el menor ruido posible para no distraer a la gente de sus
conversaciones sin importancia, y evitar llamar demasiado
la atención (la búsqueda de la misma -aunque suele ser un
placer culpable- demuestra la poca educación que se recibió
de pequeño).

al igual que en todo, hay otra cara de la moneda, la cual es
comprendida por la mayoría de la población femenil en el
mundo: aquellas que no saben caminar con tacones y no saben
utilizarlos para demostrar una actitud correcta o neurótica
(según sea el caso) ante las personas.

esto termina con nuestra salud mental, al oír constantes (pero
irregularmente aplicados) pasos sobre el mármol. Éste no
tiene un enemigo peor que los tacones, mas que cuando al-
guien accidentalmente arroja un líquido de color intenso
(morado puede ser) sobre él.

clac, clac, cloc, clac.



martes, 6 de abril de 2010

"al andar por la playa" o "karma"

Y corría, con la brisa pegajosa golpeándole la cara y el
pelo, dejándole minúsculos granos de arena hecha de
piedras y conchas disueltas a través del tiempo.

Y reía, mientras saltaba y corría. Esa risa entre cacara-
queo y burla, algo poco usual para un niño de corta edad.

Iba corriendo para escapar de los tristes y enojados niños
a los cuales les había destruido su castillo de arena por
medio de unas rápidas y certeras patadas.

El niño solo volteó a ver hacia atrás para asegurarse de haber
hecho el mayor estrago posible.

¿Por qué? Por el simple hecho de hacerlo. El volver a pensar
en lo que hizo le dio nuevas ganas de reír.

Esto no sucedió gracias a que tropezó, dándose de lleno
con la arena, con sus dientes masticando un sabor como
a pescado podrido.

lunes, 22 de marzo de 2010

"¡cuando tenga cien años ya tienes el derecho de decirme viejo!"

Le dió el último trago a su bebida y dijo:

-¡Me retiro a mi cuarto! Yo ya estoy viejo para
estas andanzas...- Entre riéndose y no, se fue.

Cinco o seis palomas bien cargadas ya le hacían
efecto rápidamente. El camino de la sala al cuarto se
le hizo eterno.

Veía los marcos de las puertas por donde pasaba como
bocas enormes de monstruos que lo tragaban hacia
la oscuridad de su cuarto.

-¡Quién me viera! En mis épocas de oro qué chingaos
me iba yo a ir a dormir con seis palomas. Pero bueno,
los años pesan, y 97 años no son tan poquitos.

jueves, 18 de marzo de 2010

"La buena conciencia de un asesino" o "El Laberinto Mental"


El sonido de la bala aún retumbándole en los oídos,
se dedicó a buscar una salida alterna.

Mientras repasaba todas las puertas de la casa, en su
cabeza todavía flotaba la imagen del hombre antes del
disparo.

-No quiero ni imaginarme la cara de su vieja cuando
lo vea todo ahí tirado. Peor tantito si lo ven los huercos.
Esa imagen no se las quitas ni con agua bendita.- Se dijo a
sí mismo. -Pero se lo merecía... o al menos eso me dijeron.

Le dijeron que solo fuera a la casa, disparara y se fuera.
Nunca le dijeron por qué. Solo quería hacerse creer que
tenía una justificación para lo que hizo.

Se detuvo.

Volvió en sus pasos y buscó una sábana. Llegó hasta el cuerpo
y lo tapó con torpeza.

-Mejor así- pensó.

Acto seguido prosiguió en su búsqueda por una salida.

sábado, 27 de febrero de 2010

el pulpo.


- ¡Camarero! La cuenta por favor- Podía oír en la mesa tres.
- ¡Camarero! Relléneme el whisky- Creía que ese grito provenía
de... de... posiblemente la mesa 7... ¿O tal vez la 9?

- ¡Joven! ¡Recaliente el filete que ya se enfrió!- Esa mesa era la dos.
- Enseguida lo atiendo caballero...- Decía atropelladamente a
cada petición de las mesas por las que pasaba.

Justamente hoy tuvieron que enfermarse sus compañeros:
Día de San Valentín y los "enamorados" llenaban las mesas.
El restaurante se llenaba de un calor dulce realmente sofocante.

Se estaba impacientando, mientras las órdenes de los comensales
destacaban entre el incesante murmullo "in crescendo" que
había en el restaurante.

Se sentía náufrago entre la veintena de enamorados que
saturaban el pequeño establecimiento de la Avenida Reforma.
No veía el sentido del día de San Valentín mas que era un
pretexto para el gobierno de ganar más dinero.

No tenía fundamentos en los cuales basar su hipótesis
pero le gustaba echar la culpa de todo al gobierno. Porque
normalmente era su culpa ¿No?

-¡JOVEN! ¡La cuenta por el amor de Dios!-

jueves, 25 de febrero de 2010

otro cuento nuevo.

-esto ya cae en lo poco sano.

"La Paloma"

No comprendía como todo lo echó a perder de esa
manera.


Prendió un cigarro, exhaló el denso humo y soltó
algunas lágrimas. Nunca supo si de coraje o por el
humo del cigarro, el cual por el viento, le cayó direc-
tamente en los ojos.


Se quedó viendo con una extraña fijación a un perro.
Jugueteaba con una paloma que al parecer era demasia-
do estúpida para salir volando de ahí, viend el riesgo
que presentaba el estar cerca de las patas del can, mientras
aquél saltaba con felicidad.


El hombre terminó su cigarro, lo tiró hacia donde estaba
la paloma, y sin ver la consecuencia de su acto caminó
derechito hasta la florería de la plaza. Compró un bouquet
pequeño y le adjuntó una tarjeta, donde escribió:


"Lo siento."




5, 3...

miércoles, 24 de febrero de 2010

nuevo cuento.


al parecer la creatividad fluye en tiempos de estrés absoluto...

"Vieja Loca"

-¿Por qué ahora?- Se preguntaba él.

¿Por qué justo ahora cuando todo parecía que volvía a su
monotonía habitual? Ya le estaba gustando el pasar su
semana sin preocuparse de nada concerniente a ese tema,
pero ese monstruo tuvo que volver a espantarlo día y no-
che.

-Dame un whisky en las rocas, Gaspar- le dijo al bartender
no con la calma de siempre. Se sentía diferente. Perseguido.
Alguien en las sombras buscaba su mente y estaba cerca de
tomarla por completo.

No quería estar así. El mero hecho de pensarlo le aterraba.
Le quitaría lo divertido a su vida aburrida de soltero.

-Ella cree que la volveré a buscar, pero no lo haría ni aunque
el mismo diablo me obligara. Antes muerto.- Dijo el hombre,
ante la mirada despreocupada del bartender, quien se había
acostumbrado a oír hombres discutiendo con ellos mismos.

5, 3...

sábado, 13 de febrero de 2010

es algo.


son unos mini cuentos muy malos pero quiero compensar
la falta de posts en los últimos meses.

(conversación interrumpida)
No podía oír nada con el murmullo incesante de los comensales
en el restaurante. No le quedó de otra mas que simular que
entendía lo que le decía y asentir con la cabeza cada vez que la
joven detuviera su plática como pausa para respirar.

(obsesión)
Se frotó vigorosamente las manos con el alcohol desinfectante
por miedo a contraer alguna enfermedad.
-¡Con las cosas como están, prefiero no arriesgarme!- Al mismo
tiempo que los otros locos en el manicomio lo veían con ojos
fijos pero al mismo tiempo distantes, como si esa escena se
debatiera entre la realidad y sus sueños.

ahí estan... si pueden dejen sus comentarios.

5, 3...

viernes, 5 de febrero de 2010

naranjas o cebollas.

la verdad es que no sé mucho de biología, pero lo que sí se
es que la persona pasa por muchos cambios a lo largo
de su vida, como una naranja.

así también, cada cambio resulta ser una experiencia traumática
para la naranja. no les miento queridos lectores, un cambio
puede ser para bien o para mal. déjenme decirles que cualquiera
de los dos van a ser dolorosos.

el hombre se acostumbra a una rutina y cuando pierde esa rutina,
se ve perdido hasta que se adapta a sus nuevas circunstancias y
desarrolla una nueva rutina igual de monótona que la anterior,
pero que le permite sentirse seguro y cómodo con ella.

así también está el ejemplo de la cebolla, siendo que está
compuesta de muchas capas. el hombre es lo mismo. hasta hace
llorar igual que la cebolla.

el hombre a lo largo de su vida debe retirar muchas capas de
su ser (con el supuesto dolor que esto acarrea) para poder
convertirse en lo que se convertirá.

¿tiene sentido?


5, 3...

jueves, 4 de febrero de 2010

el velo de penélope.

qué fácil es la vida para los escritores.

me identifico con la situación en la que estaba el gran
maestro Augusto Monterroso:

solo escribo cuando me dan ganas de escribir.

los autores se pueden hacer tontos por un tiempo hasta
que sus fanáticos comienzan a quejarse de la falta de una
pieza literaria más que agregar a su biblioteca personal.

(por eso el título)

5, 3...